Tras el parón de Semana Santa, vuelven los entrenamientos y lo hacen a gran intensidad.
Ayer lunes, bajo un sol de justicia, calentaron los lobos con carrera contínua alternando series de sprints, al ritmo que marcaba el preparador físico y bajo la atenta mirada del segundo entrenador.
Sin dar descanso apenas y tras unos breves ejercicios de estiramientos, comenzó un alegre rondo para dar confianza a los jugadores en el trato al balón.
Destacó en dicho rondo el lateral más rápido al Oeste del río Ulzama, que en algún momento nos deleitó haciendo malabares con el balón.
No debió ser todo del agrado del preparador físico, que en algunos momentos abroncó al grupo por falta de intensidad, aunque la sangre no llegó al río.
Tras la preparación, llegó el plato fuerte del entrenamiento: ataque a una portería, de tres contra tres defensas y portero, donde se impusieron con gran calidad los atacantes a los defensores.
A la vista de la gran dificultad en parar a los atacantes, llegó a colocar el equipo técnico a los dos porteros juntos bajo los palos. Se intuye para el próximo partido, gran cantidad de goles a favor.
En fin, buenas vibraciones para el próximo partido. Nos vemos ...
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